Para las que no sabéis de qué se trata Bellysurdance os lo explico brevemente: es un festival de Danza Oriental que lleva, con la del pasado mes de abril de este año, nueve ediciones. Se realiza en Jaén capital, bajo la mano de Alika, profesora de danza oriental en dicha ciudad.
Hasta ahora siempre me había fijado en el programa de artistas que acudían cada edición con mucha atención, pero sin tener posibilidad de ir, debido a la gran variada de oferta de festivales de danza oriental que hay en España (afortunadamente) en la actualidad, y a mi agenda apretadísima con los compromisos con Nesma y la Compañía Al-Andalus Danza.
Pero este año ha sido diferente, y muy a mi pesar perdiéndome el taller de Mahmoud Reda de Madrid decidi por fín visitar Bellysurdance, tras la atractiva idea de volver a ver a Jillina (the best!!! como dice una colegui que si está leyendo esto sabrá que me refiero a ella....) y gracias también al ánimo de Cristina Samaniego que también estuvo presente en el evento.
No tengo nada más que buenas palabras para este festival, ha sido mi pequeño gran descubrimiento: un listado de profesores de gran calidad, magníficos en el escenario y fuera de él: Alika, Jillina, Fadua Chuffi, Mohamed el Sayed,....una organización bastante buena, una oferta de formación variada y entretenida, dos espectáculos fabulosos y un precio muy razonable y económico ¡qué más se puede pedir!
Por pasos.....
Los primeros talleres que recibí fueron de la mano de Fadua Chuffi, una brasileña de corte antiguo al bailar, con una técnica muy bien depurada y algo compleja....y una sonrisa permanente en la cara. Muy buena.
Con Alika un descubrimiento de un estilo totalmente diferente y muy especial, muy suyo, una unión sutil de la danza contemporánea y la danza oriental que (para las que no hemos dado nunca contemporáneo) era bastante compleja, pero un reto asumible a base de trabajo y ganas que emocionaba....muy buena!!!
Con Jillina, ufff!!!! no tengo palabras. Adoro a esta mujer, por su fuerza, su caracter, su manera de enseñar y de transmitir, su filosofía de la danza y de la vida, su andadura y trayectoria, sus coreografías sencillas pero mágicas, asequibles a casi todas las bailarinas de mediana formación y que hacen soñar a las que saben poquito, y disfrutar a las que, por el trabajo y el tiempo dedicado, sabemos un poquito más....todo en ella es sabiduría. Siempre se aprende mucho con esta mujer. Me quedo sobre todo con sus momento de buen humor y sus payasadas llenas de encanto que nos acercaban a su persona, su sinceridad, y sus brillos en el escenario.....(y no me refiero a los brillos de sus trajes, que por cierto, ¡¡¡eran espectaculares!!!!!). THE BEST
Mohamed el Sayed me sorprendió por su buen hacer en el taller de giro sufí,.....este taller he de reconocer que me aterrorizaba, pues las que nos mareamos incluso en el coche con las curvas....no podemos llegar a imaginar el estar minutos y minutos girando sobre nosotras mismas.....pero he aquí que su buen hacer, sus enseñanzas, su energía tranquilizadora y segura...obraron el milagro con muchos de los que allí estábamos....y os aseguro que fue una experiencia muy especial y que me hizo superar un miedo, y cuando eso se consigue uno se siente MUY BIEN. (girar girar y girar, ahora lo hago en casa como el que se come un bocadillo a media tarde, je je)
El escenario.....
Dos fueron los espectáculos del festival. El del viernes era un espectáculo en el que actuaban Alika con Rachida (una mujer pura energía en el escenario). Fue una hermosa representación de temas clásicos de la danza oriental....lo mejor, sin desmerecer a las bailarinas que estuvieron fabulosas, los músicos destacaron por su maestría, todos ellos, y nuestro conocido y querido Fernando Depiaggi nos transportó con su Nay a las orillas del Nilo. Una pasada la música en directo!!!
El espectáculo del sábado ya fue de variedades, actuando los profesores de la Gala, Jillina; como ya os dije brilló como el Sol, Alika demostró su gran personalidad en el baile, Fadua nos transportó a la danza de décadas más antiguas, Rachida impresionó con su energía, y Mohamed hizo girar a todo el teatro en torno a su falda....muy hermoso. La bailarina Lionele, invitada a este espectáculo, interpretó el tema Enta Omri con acierto.
En definitiva, he vivido a tope este festival, ha sido una experiencia preciosa, y espero que vosotras, que amáis esta danza, tengáis la ocasión de vivir este Festival en futuras ediciones, y como está cerquita no es un gran esfuerzo, y merece la pena. He tenido pequeños descubrimientos y vivencias muy hermosas que me guardo para mí, he aprendido también detalles amargos del mundo competitivo de la danza oriental, mundo que no todos saben llevar con integridad y que nos daña a todos. Pero por encima de todo está la amistad, el valor de esta danza y de las personas.
Me quedo con las sabias palabras de Jillina (fueron en inglés pero lo traduciré a mi manera....): la danza oriental nos dá muchos regalos en la vida, da igual para lo que estemos con ella, ya sea profesionalmente o solo por afición o entretenimiento, esta danza nos regala a todas mucho, es muy generosa: nos aporta, salud, bienestar, diversión, autoestima, nuevas relaciones y encuentros sociales, experiencias, conocimiento de uno mismo y paz interior, y en otros casos también es una forma y medio de vida. En el mío es todo, sobre todo forma de vida, ya no sé vivir sin esta danza....ni quiero.
Por eso sigo aquí.
En estas imágenes me véis con Mohamed al Sayed, antes de su taller de giro sufí, y con Fadua Chuffi.
Gracias a todos!
Por la parte que me toca... ¡yo tampoco quiero que vivas sin esa danza, profe!, por eso sigo aquí ;-)
ResponderEliminarEn cambio lo que sí quiero es girar, y girar, y girar en casa (y resto de lugares) como quien se come un bocadillo a media tarde :-)
Alicia.
Ali, acabo de ver tu comentario. Me ha hecho mucha gracia por lo del bocadillo, te aseguro que intentándolo todo se puede conseguir...y estoy segura que tú también podrías girar y girar. Supongo que nos veremos pronto, gracias por estar ahí!!!
Eliminar